jueves, 16 de noviembre de 2017

LOS GÉNEROS PERIODÍSTICOS

LOS GÉNEROS PERIODÍSTICOS. CARACTERÍSTICAS


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LA NOTICIA
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Así es el anuncio de la Lotería de Navidad 2017
Amenábar dirige el nuevo anuncio de la Lotería de Navidad

El cineasta Alejandro Amenábar es el director del anuncio del Sorteo Extraordinario de Navidad de Loterías y Apuestas del Estado 2017. "El reto era conjugar una visión cotidiana con cosas mágicas y extraterrestres. Fundamentalmente es una historia de amor. La mayor suerte no tiene por qué ser ganar la lotería, sino compartirlo con alguien. El mayor premio es compartirlo”, ha señalado el propio Amenábar en referencia al eslogan de la campaña, que coincide con el de años anteriores.
Dos jóvenes, ella extraterrestre y el terrícola, protagonizan este año el anuncio de la Lotería de Navidad, un "cuento de navidad" de amor "mágico" titulado "Danielle". Loterías ha realizado tres versiones. La más larga, que se emitirá a partir de mañana martes en televisión, dura tres minutos y medio. Este año, la campaña en televisión se completa con otra digital, a través de Internet donde los usuarios "podrán probar suerte y quizá también encontrar a alguien especial". Para ello, dice Loterías, solo tendrán que "registrar los números de los décimos a los que juegan y conectar así con personas que lleven esos mismos números". La acción está estrechamente relacionada con el argumento de la película.
El anuncio del año pasado fue dirigido por Santiago Zannou (El truco del manco, Alacrán enamorado) responsable de la campaña protagonizada por Carmina, una maestra jubilada que, tras un pequeño despiste, implicaba a todo su pueblo para mantener toda su ilusión.
El próximo 22 de diciembre se celebrará el sorteo navideño, presentado este lunes y en el que la principal novedad es que se han puesto a la venta 170 millones de décimos, 5 millones más que en 2016, ya que la emisión de este año consta de 170 series de 100.000 billetes cada una. De esta forma, se han emitido décimos por importe de 3.400 millones de euros, de los que se distribuirán en premios el 70 %: 2.380 millones.

EL ARTÍCULO DE OPINIÓN
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LA VIDA DULCE

Henos aquí en mitad de la canícula y quizá de nuestras vacaciones. O sea, justo en esos días con los que soñamos el resto del año. Un tiempo de sensualidad en el que decidimos mimar nuestro cuerpo: la gozosa pereza de levantarse tarde, el placer de comer y beber con cierto exceso, el gustito de sentir la frialdad del agua por encima de nuestra piel recalentada. Todo perfecto, salvo por esa tonta tendencia que padecemos los humanos a sentirnos insatisfechos con lo que tenemos y a fastidiarnos el presente con cualquier fruslería. Como decía John Lennon, la vida es eso que sucede mientras nosotros nos dedicamos a otra cosa.
Y esa otra cosa puede ser una estupidez. El otro día vi a una chica treintañera en una playa cubierta con una camisola hasta las rodillas. "¡Que no, que no me quedo en bañador, que estoy muy gorda!", decía con exasperación a sus amigas. No sé qué está pasando en España con el cuerpo: somos el primer país de Europa y el tercero del mundo en operaciones de cirugía estética. Se diría que no conseguimos aceptarnos como somos. Por añadidura, la obsesión por la delgadez es un malentendido mundial. Hace unos meses, una revista femenina australiana publicó las fotos de cuatro chicas con tipos distintos y los lectores tuvieron que elegir el cuerpo ideal. La mayoría de los hombres eligieron a una joven que había sido descrita como "con sobrepeso" por el 85% de las mujeres. Y la modelo que recibió la gran mayoría de los votos femeninos sólo obtuvo un 19% de los votos masculinos: la chica era un espárrago. No sabemos vernos, de la misma manera que no sabemos apreciar el presente en toda su riqueza e intensidad. ¿Un cuerpo gordo? No, un cuerpo sano, una realidad apacible, un momento feliz. Déjate de pamemas y disfruta el regalo de esta vida dulce que te late en las venas. Porque luego se acaba.
Rosa Montero.
7.000
Al parecer en el mundo hay 7.000 lenguas. Y la mitad están en trance de desaparición. Acongoja imaginar esa gigantesca masacre silenciosa. Una lengua es algo extraordinario, es uno de los mayores logros de la mente humana. Un logro colectivo. Asombra todo ese ingenio, esa creatividad, ese esfuerzo invertido por una comunidad durante milenios no sólo para crear una herramienta de comunicación eficaz, sino también para dar forma a sus sueños y a sus miedos, a su manera de ver el mundo. Una manera única, porque cada lengua es una traducción de la realidad. Y todo eso, todo, junto con las memorias de los antepasados, los cuentos que las madres contaban a sus niños, las canciones y los rezos, desaparece calladamente para siempre cuando muere una lengua, y al poco es como si ese pueblo nunca hubiera existido.
Siempre me conmovió esa preciosa historia de Humboldt, el gran naturalista alemán, que en su viaje de exploración por Centroamérica entre 1799 y 1804 se encontró con que una de las tribus que quería visitar, la de los atures, había sido exterminada por los caribes, y que sólo quedaba un pobre loro viejo y tiñoso que farfullaba una cantinela que nadie entendía, que era la lengua atur. Humboldt, sabedor del valor de lo perdido, invirtió infinidad de horas intentando transcribir al papagayo y rescató cuarenta palabras, es decir, cuarenta sonidos seguramente deformados por el animal y que nadie sabía lo que significaban. Pero por lo menos gracias a ese pájaro, y sin duda a Humboldt, hoy estamos siquiera mencionando a los atures. Déjame que te diga que hay casos peores, como el de esos dos ancianos del Estado de Tabasco, en el sureste de México, que son los dos últimos conocedores de la lengua zoque que hay en el mundo. Lo malo es que están enfadados y no se hablan. Somos más idiotas que los loros.
Rosa Montero.









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